Antes de llegar a La Guajira, se despierta la emoción por descubrir un territorio donde el mar Caribe se encuentra con la aridez del desierto. La ruta inicial abre la puerta a un viaje lleno de contrastes y cultura.
Durante el recorrido, el desierto revela su magia con paisajes infinitos, playas vírgenes y atardeceres inolvidables. La tradición wayuu acompaña la experiencia, con historias, artesanías y sabores que hacen de cada día un encuentro auténtico.